Ingredientes (para 8-10 porciones)
8 láminas de pasta filo o brick (la típica para hacer saquitos de verduras)
25gr mantequilla sin sal
200gr de azúcar granulada (la de siempre)
400ml leche (en nuestro caso fue normal sin lactosa hacendado)
4 huevos
una vaina de vainilla
100gr de naranja seca (se puede poner fruta fresca cortada a trocitos)
azúcar glas y canela en polvo para decorar
Primero derretimos la mantequilla en el microondas con cuidado de que no se queme.
Pintamos cada una de las láminas de la pasta brick/filo con esa mantequilla, las doblamos en forma de acordeón y las vamos colocando como más nos guste en el molde previamente pintado también con mantequilla sin sal de la derretida.
Esta es la lámina usada en la receta, es la que venden en el Mercadona (trae 8 láminas redondas).
Espolvoreamos un poco de azúcar en polvo y al horno (arriba y abajo) 180ºC unos 20 minutos, cuidado que se quema si tenéis un horno tan potente como este.
Batimos los huevos junto con el azúcar granulado, luego le añadimos la leche con la vainilla (colada) poco a poco hasta que se mezcle todo bien, echamos la fruta y reservamos.
La fruta seca que hemos usado es esta del Lidl que se suele echar en los panettones.
Cuando pasen los 20 minutos de la pasta al horno sacamos y le echamos la crema con la fruta reservada, como en este caso la pasta ya estaba doradita (el horno es muy potente) pues lo tapamos con papel de aluminio y dejamos cocer al horno 30 minutos más arriba-abajo a 180ºC.
Al terminar sacamos del horno dejamos que enfríe bien sobre una rejilla,
espolvoreamos canela y azúcar en polvo al gusto .... y listo!
Consejo: para hornear utiliza un molde bonito para presentarlo directamente en él, en casa no teníamos más que una fuente de barro que fue la utilizada, pero para evitar que con el calor del horno se llegue a romper, cosa que no sería la primera vez, justo antes de meterlo al horno se moja con agua toda la parte externa del barro.